¿Creciste en compañía de un perro? ¿Te acuerdas de la primera vez que se murió una de tus mascotas?

Un estudio realizado por Joshua Russell, un investigador de comportamiento animal, ecología y conservación de Canisius College en Buffalo, Nueva York, trata de entender cómo reaccionan los niños cuando sus mascotas mueren.

Russell llevo a cabo entrevistas con niños entre 6 y 13 años para saber cómo se habían sentido y se dio cuenta de que los niños efectivamente sufren mucho cuando sus mascotas dejan este mundo. Para muchos niños, sus mascotas se convierte en sus mejores amigos e incluso los ven como sus hermanos.

Este estudio demostró que los niños pueden procesar más fácilmente el trago amargo cuando sus mascotas son viejitos y que es un shock más fuerte cuando mueren de manera repentina, a causa de un accidente o una enfermedad.

Si tu mascota está muy viejito o enfermo y te preocupa que a tu hijo le afecte mucho su muerte, hay un par de cosas que pueden aliviar este trago amargo. Tienes que saber que igual va a sufrir y que esto es parte de la vida.

En Huellitas en el Cielo sabemos la importancia de tus mascotas en la vida de tus pequeños, por ello te damos algunos consejos que te ayudarán a que tu hijo no se sienta completamente destruido.

• No le mientas: La muerte es parte de la vida y todo está en cómo se lo expliques a tu pequeño. Ser padre es una cosa muy difícil pues se trata de enseñarle a una personita cómo vivir y por más difícil que parezca, la muerte es algo que tienen que saber que existe, que pasa y que el mundo sigue adelante.

• Rituales: Desde un pequeño altar, una caja con sus cosas, una oración, una velita, dedicarle unas palabras. Los rituales le dan un cierre al proceso y te permiten sacar los sentimientos.

• Piensen en adoptar, cuando estén listos: Hay familias que deciden adoptar de manera inmediata después de la muerte de sus mascotas, pues saben que no pueden reemplazar a sus perros, pero empiezan nuevas memorias e historias con un nuevo miembro de la familia. Hay otros que prefieren dejar pasar tiempo para procesar lo que pasó. Cualquiera que sea el caso, no hay prisa, pero cuando estés listo, sal a buscarlo.

• Cuentos: Cuéntales un cuento de las aventuras de su mascota en donde sea que esté ahora y diles que aunque ya no lo vean, su perro siempre estará cerca para cuidarlos y que si cierran los ojos y piensan en él, siempre lo podrán tener cerca.

• Álbum de recuerdos: Una manera de ayudar a que tu pequeño no se sienta tan triste es hacer un álbum de recuerdos.